Ingredientes

3 berenjenas medianas con la piel limpia y firme.
1 taza de salsa de tomate casera elaborada con tomate maduro y cebolla, lo mismo que con un poco de tomillo.
100 gr. de queso parmesano rallado.
100 gr. de queso mozzarella en tajadas.
Sal
1 huevo y un chorrito de leche.
Aceite de oliva virgen extra.
Unas hojas de albahaca fresca (opcional).

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Preparación

Precalentar el horno a 180º.  Cortar las berenjenas limpias pero sin pelar en rodajas como de medio centímetro y a lo largo. Dejarlas en un colador espolvoreadas con sal durante 20 minutos para que suelten líquido y no amarguen. Después se secan con papel de cocina.

Asar las rodajas de berenjena en una sartén con un poco de aceite de oliva por los dos lados hasta que se cuezan y estén ligeramente doradas. Colocarlas sobre papel absorbente. En un recipiente apropiado para horno, poner un fondo de salsa de tomate, encima colocar ordenadamente una capa de rebanadas de berenjena y cubrir con parmesano rallado y luego con la mozzarella. Se puede añadir en este momento unas hojas de albahaca. Seguir con berenjena, tomate, queso y terminar con berenjena. Batir un huevo con un chorrito de leche y mezclar con lo que queda de queso rallado. Con esta mezcla se cubre la última capa de berenjena y se meten al horno, con calor por arriba y abajo, hasta ver que la superficie ha dorado y el queso se ha derretido por igual. Serán necesarios unos 20 minutos hasta que dore.